Con las ganas que ella tenia de besarte y decirte que si ti se moría, ella te escribió los versos mas encantadores, las palabras mas dulces que sus pensamientos habían rondado y todas aquellas anécdotas que te había suscitado.
Eres el primero que la haces dudar desde el fondo de su retorcido corazón, hiciste que su alma suspirara de primera vez, que la piel de sus mejillas se tornaba rosa cuando de ti hablaban en su presencia, su cabello nunca estuvo mas enredado por sus dedos al ponerse nerviosa cuando estabas al teléfono, sus ojos brillantes ansiaban tu regreso por aquel sendero de arena salada o quizas una tarde de pasto mas, otro dia en el jardin, sus juguetes aun están en el mismo lugar.
Quien quisiera que lo pensaran tanto, en su mente deambulas tantas oraciones sin terminar hasta que te vea, hasta que hablen, hasta que le digas que aun ante su cara debes negar tus sentimiento, que debes dejar ir un calor interno que te hace ser diferente a lo que crees, ella no esta acostumbrada a las variaciones de tema, ella solo quiere que la recuerdes con su mejor cara, con su mejor dicha, con su mejor sonrisa.
Y aun con tanto amor te vas, dejas que todo atrás y los recuerdos solo se quedan en cada lugar, en cada silla, en cada jardín y en diferentes etapas de tu mentira.
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